libreta chatarra: tanka y haikku

24.2.06

tanka y haikku

Debido al juego propuesto por "El Burlador", la semana pasada, el de construir un tanka, estuvimos indagando más en ese tema y descubrimos algunos datos adicionales sobre esta métrica japonesa, que publicamos en este post. Recordamos que el tanka es un poema corto de cinco líneas, de 31 sílabas (u "onji", en japonés), dispuestas de la siguiente forma: 5-7-5-7-7.

Del tanka se deriva el haiku, otra forma poética japonesa, tres versos, sin rima, que totalizan 17 sílabas, con la siguiente disposición: 5-7-5, i.e. los primeros tres versos del tanka. Inicialmente, el haiku tenía una palabra clave (llamada kigo) que indicaba la estación del año en el que transcurría el poema; por ejemplo, "flor de cerezo" sinónimo de "primavera", la época en que florecen los cerezos. Estructuralmente, el haiku es igual al senryu, del que se diferencia por la temática. El haiku trataba temas relacionados con la Naturaleza, mientras el campo del senryu era una mirada crítica y ácida de la existencia humana.

Los primeros tankas datan de hace más de mil años atrás y tienen un origen amoroso. Se cuenta que tras, las ardientes noches de amor, los amantes se intercambiaban poemas, ocultos en los listones del abanico o atados a una flor. El hombre enviaba a su criado con el mensaje, un tanka, que era respondido por la amada con otro tanka. Los mensajes eran más o menos crípticos, sólo para ser entendidos por los dos amantes. Cuenta la tradición que, mientras esperaba el tanka - respuesta, el mensajero aprovechaba para ganarse los favores del personal doméstico de la agasajada.

La estructura se volvió popular y empezó a ser usada para otros fines, ganándose un lugar principal en la poesía japonesa cuando, alrededor del 700 D.C., los emperadores establecieron antologías de tankas, que sirvieron de base para los concursos anuales en la celebración del Año Nuevo.

Image hosted by Photobucket.com