30.6.12

juan alberto

Nos va dejando gente y nos queda la sensación que las pérdidas son irrecuperables, porque con la ida de tipos como Juan Alberto Badía se va una Argentina que ya no existe. En la primavera de la restauración democrática, su “Badía y Compañía”, en la pantalla del Trece, fue un festival de los representantes de la cultura nacional. Un simple googleo provoca la admiración por la calidad de los artistas que pasaron por su programa de los sábados, un “simple” programa de entretenimiento. El ejercicio mental de imaginarse quiénes podrían pasar hoy por un espacio similar, deja en claro el nivel de degradación cultural de nuestra sociedad.

Badía fue un gran promotor del rock nacional. Duele mucho ver hoy a muchos de esos próceres caídos en la repetición, la decadencia o, peor aún, la obsecuencia desvergonzada con el poder de turno para disimular el cachet oneroso cobrado para desafinar un par de canciones en recitales “populares”. Es otra de las abdicaciones, otra de las decepciones que nos toca afrontar a nuestra generación. Nuestros “ídolos” de juventud, también se vendieron, como todas las cosas que tuvieron algún valor en Argentina.

De Badía nos queda su estilo profesional, claro, amable, sin insultos, agresión, libre de octanajes de odio o violencia. Que unánimamente sea celebrado por sus colegas del medio, trascendiendo ideologías o generación, es una clara muestra de lo buen tipo que fue. Lo vamos a extrañar, como extrañamos a esa Argentina que despuntaba para otra cosa que para esta patética caricatura de república bananera en la que nos hemos convertido.

Como homenaje, un puñadito de momentos de su inmortal “Badía y Compañía”. Hasta siempre, maestro.



Charly García & Fabiana Cantilo


Johnny Rivers & Pappo


Mercedes Sosa & Litto Nebia


Luis Alberto Spinetta


Virus


Soda Stereo

1 comentario:

Emilia Gutiérrez dijo...

Que grande, con el flaco spinetta...