El teniente coronel Vassal tomó la batería de doce piezas que había en Punta del Este, mientras que Popham hacía lo propio con las 20 piezas de la isla de Gorriti.
Tomado el armamento, los ingleses acantonaron todas sus fuerzas en Maldonado, esperando los refuerzos del otro lado del Atlántico que llegarían dos meses y medio después. Según Samuel Walters, la toma de Maldonado se había decidido ya “que la fuerza disponible era demasiado débil para atacar Montevideo y dado que se esperaban refuerzos en poco tiempo más, convenía esperar utilizando mientras tanto a Maldonado, como base para aprovisionarse de alimentos frescos”.
En los siguientes días, las autoridades de Montevideo enviarían al teniente de fragata Abreu con 400 hombres para rodear Maldonado y hostigar a los ingleses. Pero Abreu cometió la imprudencia de enfrentarlos en campo abierto, cerca de San Carlos, con un resultado desastroso: él murió y sus fuerzas fue dispersadas. Posteriormente, el teniente coronel José M. Moreno dirigiría un cerco de guerra de guerrillas sobre Maldonado, que pondría en aprietos a los ingleses.
Las noticias de la toma de Maldonado llegaron a Luján, muy rápidamente, motivando el festejo del general Beresford y sus oficiales, con ostentosos brindis, que provocaron la indignación y queja del alcalde de la villa de Luján, don José Lino Gamboa, en un oficio al Cabildo de Buenos Aires contando lo ocurrido, protesta que fue discretamente ignorada.
(Éste y otros posts sobre las invasiones inglesas pueden consultarse en: http://invasionesinglesas.blogspot.com)
6.11.06
Suscribirse a:
Comentarios de la entrada (Atom)
No hay comentarios.:
Publicar un comentario