dibujados

BEOWULF

A “Beowulf” le juega en contra el presupuesto. Los millones gastados en una técnica de animación sofisticada (la “capture performance”) son un pesado lastre para una historia buena (por momentos muy buena) pero que podría haberse contado con actores, tal vez, con mejores resultados. Por un momento, el filme resulta frío. Y el tipo de animación tiene su cuota de responsabilidad. Quizás porque vemos algo que se parece a Angelina Jolie, Anthony Hopkins o a John Malkovich pero no lo son. Ese es el “pero” de este filme de Robert Zemeckis.



Basada en un relato épico anónimo nórdico, el guión del Neil Gaiman (autor de historietas, entre tantas, “Sandman”) y Roger Avary (coequiper de Tarantino en “Pulp fiction”) nos cuenta la historia de Beowulf, el guerrero que viene a librar a un reino de Grendel, un monstruo que se come a los habitantes (no sólo a los chicos) crudos. Tras vencerlo, debe enfrentar a su madre (la del monstruo, no la suya), un demonio muy seductor (¡Angelina con cola de lagarto! ¡Un cardiólogo a la derecha, please!) que le tiende una trampa que deberá ser cobrada muchos años después.



Beowulf es una historia de guerreros, de hombres valientes que se enfrentaban a la muerte sin que les temblara el pulso. Y de héroes que tenían todas las debilidades del ser humano, cualidades que les permitía sacarlos del bronce. Beowulf es soberbio, fanfarrón, mentiroso, pero muy valiente. El valor lo redime de una culpa que ha ocultado toda la vida.



La trama sugiere la tentación del poder, línea interpretativa coronada en la última escena, en el intercambio de miradas entre Wiglaf y la madre de Grendel. Sólo cuando se tiene la corona, la seducción del demonio de las aguas se torna efectiva. El cálculo, la codicia, la ganancia, aflora en el soberano. La trampa está abierta, como lo estuvo para Beowulf y Hrothgar y para todos los monarcas que ocupen el trono vacío. Ese demonio no morirá jamás.



Escenas destacadas: la lucha entre Beowulf y Grendel; el encuentro de Beowulf con la madre de Grendel; la lucha con el dragón; el mencionado intercambio de miradas de la última escena.



Frases:

¡Una espada! ¡Denme una espada! ¡Pelea conmigo! ¡Pelea conmigo! ¡Pelea conmigo, maldito!

Grendel, ¿Qué has hecho?

Los Dioses no harán nada. Estamos nosotros solos. Lo que necesitamos es un héroe.

-¿Quiénes son?
-Están vestidos como guerreros…



-Dicen que tienen un monstruo. Dicen que tu tierra está maldita. Soy Beowulf y estoy aquí para matar a tu monstruo.
-Ya hemos tenido muchos héroes tontos que vienen y mueren por el oro.
-Si morimos será por gloria, no por oro.

Esta noche, será diferente. Esta noche pelearemos.

Me pregunto cuantos hombres han muerto por el amor a la belleza.

El demonio es la vergüenza de mi esposo.



Pero hoy... El reino de los monstruos ha terminado…

¿Cuántos monstruos debo matar? ¿La madre de Grendel, el padre, el tío de Grendel? ¿Acaso está todo el árbol familiar de los demonios?

Eres tan monstruo, como mi hijo Grendel.

Tu historia vivirá siempre cuando todos los que te conocieron vivo, sean polvo.

Claro que me conoces. Me quitaste un hijo. Dame un hijo. Quédate conmigo. Ámame.

¿No es suficiente con regresar con la cabeza de un monstruo?

-No es una batalla de gloria. Es un insulto.
-El destino no favorece a los héroes, mi Señor.
-Ni nosotros podemos librarnos de él.



Puede que ahora no tengamos monstruos. Pero el tiempo de los héroes está muerto. El dios cristiano los ha asesinado, no dejando más que mártires, miedo y vergüenza…

Los dioses no pueden morir por la espada. Los Dioses no podrán ser maldecidos.
Pon tu hacha aquí. Nadie me mata... ¡Mátame! No podrás matarme, amigo mío. Morí hace muchos años cuando era joven. Envíenlo a casa. Tiene una historia que contar.

Sabes, cuando yo era joven pensaba que ser rey no era más que pelear y saborear la piel de la mujeres en la noche. Nada es tan bueno como debería ser. Nada. Ni siquiera una hermosa mujer…



El cuerno dorado ha regresado a ti. El acuerdo ha terminado.

-Beowulf, ha pasado mucho tiempo…
-Deja mi tierra en paz



Te dije que había pasado mucho tiempo sin héroes.

Es demasiado tarde para mentiras, Wiglaf... muy tarde...

CONSEJO: es para ver en pantalla grande, no dude.