En un post anterior dimos toda la data del libro:
http://libretachatarra.blogspot.com.ar/2013/05/fulbo-de-dos.html
Y aquí, para ir calentando el ambiente, adelantamos un fragmento del libro. Los esperamos el martes 11, a amigos, conocidos y visitantes de esta página. Será un gusto verlos y/o conocerlos.
PROPORCIONAL
(fragmento)
El falso traje Armani, la sonrisa tostada de cama solar, un botox mal aplicado y el Rolex trucho que hacía juego con el fucsia con vivos turquesas de la corbata. Extendió los cinco dedos como salamines manicurados hacia Ferletti.
-¿Cómo está, Presidente?
Ferletti se quedó mirándolo, con cara de culo. El tipo sostuvo la mano en el aire unos segundos más y luego, cuando comprendió lo inútil de su intento, retrajo el brazo, manoteando la silla donde sentarse.
Se cruzó de piernas, cuidando la raya del pantalón y lo miró, con una sonrisa de oreja a oreja, con plena satisfacción.
Sostuvo la mirada un largo rato, sin perder la compostura.
-¿Se puede saber qué carajo vino a hacer, Ottolenghi?
Ottolenghi puso una cara de confusión total. Y vale el término: puso. El tipo, se notaba a la legua, era un experto. Simuló una inexistente convulsión emocional, inclinándose hacia delante para darle más sustento a su actuación.
-¿Cómo a qué vine, Presidente? -expresó su ensayada turbación- ¡A cobrar! ¿A qué otra cosa iba a venir?
-¿¡A cobrar!? -esta sorpresa era espontánea y visceral- Pero… ¿qué tiene en la cabeza?
-Pero… perdón, Presidente… pero… lo que charlamos la otra semana…
-¡Eso! ¡Lo que charlamos! Que el Balde Madonne, su representado –subrayó el término- iba a ir a menos… ¿Era o no era ése el trato? Cinco lucas y se tiraba a muerto.
-Justamente… -respondió tranquilo Ottolenghi, volviéndose a cruzar de piernas con aire sereno.
-¿Justamente? Pero… ¿Qué mierda estaba haciendo el sábado, Ottolenghi? ¿Estaba de putas y no se enteró del resultado? ¿No vio el partido?
-Sí. Lo vi. Por eso estoy acá…
-¿Cómo? Pero… ¿usted es pelotudo o se hace, Ottolenghi?
-Perdón, Presidente… con respeto…
-¡Madonne nos empató en el tercer minuto de descuento! ¿Eso es ir a menos? ¡Se mandó un jugadón bárbaro, el hijo de puta! ¡Eludió a media defensa! ¡Si jugara la mitad de los partidos así, ya lo tendrían vendido a Europa! ¡Me cagó el fin de semana! ¡Toda la platea insultándome! ¡Hasta mis nietos me reputeaban en la tribuna! ¡Y usted tiene el tupé de venir a cobrar!
-Tranquilícese, Presidente. Quedó claro el punto. Cinco mil para perder. Ése era el trato. Está claro. ¿Yo le dije que no? ¿Eh? ¿Le dije que no? Dígame…
-No… no… ¿y entonces?....
-No me dejó terminar. Yo vengo a cobrar. Pero no los cinco mil… sería un caradura… Cinco mil era si perdíamos… Pero empatamos…
-¿Entonces?
-Dos mil quinientos…
MARCELO DE BIASE – PABLO GUERRINI
“Fulbo de a dos”
http://www.dunken.com.ar/web2/libreria_detalle.php?id=12716
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