En efecto, la ignorancia de los fuertes es odiosa e infame —pues es perjudicial incluso para los próximos, ella y todas las imágenes que de ella hay—, la débil, en cambio, alcanza para nosotros la categoría y naturaleza de lo ridículo.
PLATÓN
“Filebo (49, c)”
Suscribirse a:
Comentarios de la entrada (Atom)
No hay comentarios.:
Publicar un comentario