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Tómense el trabajo de leerlos y les cuento que hay de nuevo en esta apasionante historia.
Los promotores de la empresa telefónica que estafa a sus clientes con promociones engañosas, con el implícito aval por omisión del ente regulador correspondiente, siguen llamándome, todas las semanas, ofreciéndome las mismas ofertas tramposas que motivaron los anteriores posts.
En un primer momento, me dedicaba a seguirles la corriente y, mediante preguntas, llevarlos al callejón sin salida que demostraba que me estaban engañando. Les decía si se daban cuenta que no me estaban “premiando” con ningún servicio sino que me querían engañar y si eran conscientes que me estaban mintiendo a sabiendas. Ahí se excusaban y me cortaban rápidamente.
En una segunda etapa de mi vida, los reputeaba, sin distinción de sexo, aprovechando para liberar mi carga cotidiana de estrés. Como seguían llamando frecuentemente, me resultaba muy útil para descargar tensiones.
En los últimos tiempos, más acorde con una onda zen, directamente les cortaba en cuanto se identificaban como promotores de la empresa telefónica adicta al engaño y a la trampa.
Bueno, hubo un cambio en la última semana.
Recibo un llamado. Preguntan por mí. Me identifico como el susodicho y, acto seguido, contestan: “Soy Lorena de X (reemplacen por el verdadero nombre de la empresa telefónica que estafa a sus clientes)”.
¡Y me cortó!
¡Se tomaron el trabajo de llamar, verificar que yo los estaba atendiendo, sólo para cortarme!
Esto revela varias cosas:
a) les jodió más que les cortara sin escucharlos que el hecho de que los reputeara.Así que cuando vean por la calle, un piquete o manifestación de empleados de la empresa telefónica que estafa a sus clientes, reclamando sus derechos laborales o el pago de sueldos caídos, en mi nombre, háganles un corte de manga.
b) tienen tiempo para perder.
c) de b) se desprende que tan bien con las ventas no te va, chiquito.
d) son tan giles que no se dan cuenta que si trabajan para una empresa que engaña a los clientes que son la base de sus ingresos, sólo va a ser cuestión de tiempo para que terminen estafándolos a ellos.
Porque estos tipos son tan cómplices de mentirles a la gente como los ñatos que los mandan.
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2 comentarios:
Yo trabaje 20 días vendiendo una "linea mejor" a los clientes. Era mi primer trabajo y en la empresa me lo pintaban con todos los colores del arcoiris como el mejor trabajo del mundo. A medida que pasaban los llamados y lo que me contaban los clientes, me daba cuenta de como los estafaban, y como yo era la "voz" de la estafa. Un día llamo a una señora que hacia un mes habia perdido a su pareja y se puso a llorar y contarme que queria morirse, obviamente no podia cortar, obviamente tenia que al menos ofrecer el producto porque a mi me estaban escuchando mis superiores. Cuando me di cuenta de que en cada bocadillo que podia meter le decia a la pobre mina: "nooooo, pero señora yo la entiendo, pero esta linea le conviene, hasta va a poder hablar más con sus amigos. Usted necesita el apoyo de ellos, va a poder hablar más seguido, e incluso abaratando costos".Me di cuenta que no podia seguir siendo asi de porqueria. Ok, nadie sabia que era yo, a pesar de que daba mi nombre. Nadie me veia. Quizas demasiada persecuta de mi parte. Pero ver como estafaban a taaantas personas con sus "beneficios exclusivos" me revolvia el estomago.
Ojalá lo puedas solucionar, y ojalá algún día alguien les rompa bien el orto. Ups.
Uno entiende, Anónimo, que los chicos y chicas que ponen la cara no son los responsables. Ellos reciben la puteada. Y si bien son cómplices de la estafa, están en el último escalón de la cadena. El problema es que tenemos un ente regulador que no sanciona y que sabe lo que hace esta empresa, pero la deja hacer. Y una Justicia que mira para otro lado. No hay nada que se pueda hacer, más que cortarles.
Y te felicito por tu actitud, aunque te costó el trabajo. Fue muy ético. Y eso suma en las cuentas del alma. No en las del bolsillo, claro.
Un abrazo y gracias por el comentario.
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